La crisis política a la que asistimos esta semana es producto del abuso y el desprecio de la democracia. Obtener victorias pírricas a cambio de la estabilidad política del país; es la forma más pura de desprecio por un sistema que se da por sentado.
Un sistema que a ninguno de los protagonistas les ha costado absolutamente nada. Ni un pito, para decirlo en buen costarricense. ¿Entonces cómo valorarlo? Y con el nivel de discusión política de prekínder que tenemos, bien se puede pensar que la democracia costarricense es un adorno.
Digamos que es un decorado con el que la gente se llena la boca para decir que somos muy cargas. Pero a la hora de la hora, no saben lo que significa esa democracia, mucho menos cómo vivir en ella. Y eso aplica para todo el mundo: periodistas, dirigentes sindicales, empresarios, curas, pastores hasta llegar a los infumables de mis vecinos que se quejan por todo y no hacen nada por el barrio. Sí, toda esa inmensa cantidad de gente. No se salva nadie.
De todos modos ¿A quién le importa? Si aquí lo que falta es un hombre con huevos que venga a poner orden en esta democracia desechable. Eso sí, siempre un mesías. Alguien que ME resuelva MIS problemas, porque YO no voy a hacer NADA por MI MISMO.
Pero esto no es de ahora, tenemos años destruyendo el sistema. El chantaje legislativo, clientelismo político de todo tipo y el uso del aparato de gobierno para hacer negocios han estirado tanto la cuerda que ya casi se revienta sin que nadie la vea venir.
Ni qué se diga de cómo estigmatizamos gente, como empobrecemos a las demás personas o la forma en que se hacen concesiones en favor de los intereses privados encima de los nacionales.
ESTA DEMOCRACIA NO TIENE REPUESTO
Podemos coincidir en que siempre hay demandas justas. En lo que ya no podemos transigir es en que los cromañones de la política tomen esas demandas y las usen para debilitar la institucionalidad.
Destituir un ministro solo por el gusto de hacerlo a sabiendas que eso abre el paso a la caída del gobierno es más que grave. Que la iglesia católica y grupos fundamentalistas estén detrás de esto persiguiendo nuestro retroceso a la edad de piedra moral no tiene perdón de Dios.
El oportunismo que hubo al usar a los y las estudiantes como señuelo da asco. ¡Pudo haber muerto un güila! ¡Pero qué importa si esta democracia desechable da para lo que sea! ¡Aguanta lo que le tiren! ¡Hasta muertos!
Usaron la Marcha del Orgullo como excusa ¡Total! ¡Si hasta uno de los dirigentes es gay y no le importa que niños y niñas que sufren matonismo en la escuela sean agredidas y agredidos en el baño!
Tenemos diputados y diputadas cuya estatura intelectual se mide en milímetros y que se dejan decir que vivimos en una dictadura. ¡Por supuesto! ¡Si en su perra vida los persiguieron por su forma de pensar! Tampoco es que piensen mucho. Menuda dictadura es esta en la que dirigentes políticos van a las escuelas a mentir a padres, madres, hijos e hijas sobre educación sexual, drones y baños neutros.
En esta dictadura, alguien invirtió miles de dólares metiendo noticias falsas en redes sociales que generaron odio y desinformación. Pero eso no importa, porque esta democracia desechable es una dictadura.
HAY QUE DEFENDER LO QUE NOS QUEDA
Reconozco que no he podido defender esta democracia tanto como habría querido. No la doy por sentada, la aprecio y la valoro porque me dio cobijo y protección. Pero me gana la frustración. Cuando leo a gente escribir con liviandad que todo se va al carajo por los baños neutros, juro que no puedo. No hay argumento que trascienda. Todo pega contra la pared más dura de la ignorancia.
Lo intento, pero me cuesta. También me molesta la torpeza del gobierno. No puede ser que nunca informaran correctamente qué era un baño neutro, que la tarea se la dejaran a la buena de los medios de comunicación que lucran de titulares incendiarios. Ni qué decir de la campaña de radio sobre las pruebas Faro. ¡Cristo en llamas! ¿De dónde salió semejante esperpento de comunicación? ¿Se la encargaron a un enemigo?
En serio ¿Dónde está la estrategia de comunicación si saben que los esperan en cada esquina? Parece que el problema no era el ministro anterior. Es sistémico.
Sin embargo, merecen una mención especial Diario Extra y CrHoy. Ambos medios se han dedicado a destruir cualquier cosa que huela a gobierno. Celebran permanentemente el “todo mal”. Trabajan denodadamente porque el país no crea en la política, que vivamos en un estado constante de desconfianza y crispación. Aquí tienen lo que buscaban: estamos al borde del abismo y están listos para titular “3, 2, 1 ¡Allá vamos!”
Esta democracia la salvamos entre todos y todas. La crítica artera y gratuita no aporta. Se necesitan ideas para sacar al país adelante. Pero el chiquero en el que estamos, lo hemos venido cavando disciplinadamente desde hace más de 30 años.
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